Hay mujeres que siguen sonriendo, respondiendo mensajes y hablando contigo… pero por dentro ya no sienten lo mismo.
Y eso ocurre cuando ciertas actitudes empiezan a vaciar el vínculo sin que tú lo notes.
1. Restarle valor a los momentos que para ella son importantes
Puede ser una fecha, una conversación o una situación que te pareció mínima.
Si ella te habla con ilusión y tú respondes con apatía o indiferencia, algo cambia.
No necesitas hacer grandes gestos, pero sí demostrar que estás ahí con atención.
Porque lo que no celebras con ella, se lo lleva la distancia.
2. Reírte de lo que para ella es serio
Cuando algo le molesta o le preocupa y tú decides bromear, burlarte o ignorarlo, estás rompiendo la conexión.
Tal vez lo haces para suavizar el ambiente, pero ella lo recibe como falta de respeto emocional.
Y cuando una mujer no se siente tomada en serio, su corazón se apaga poco a poco.
3. Hablar más con otras personas que con ella
No se trata de celos, se trata de equilibrio.
Si compartes tu día con medio mundo, menos con ella, lo va a notar.
Cuando siente que no eres transparente, empieza a desconfiar.
Y donde hay duda, no crece el afecto.
4. Hacer lo mínimo esperando lo máximo
Estás presente, pero sin esfuerzo.
Contestas, pero sin interés.
Estás, pero no sumas.
Y sin darte cuenta, le estás diciendo que ya no eres el mismo.
Ella puede seguir sonriendo, pero por dentro ya está pensando en cómo alejarse.
5. Repetir errores que ella ya te marcó una vez
Cuando alguien te dice lo que le duele y tú lo vuelves a hacer, el mensaje es claro.
No es descuido, es desinterés.
Y ese tipo de indiferencia no se discute, se suelta.
Cuando una mujer sigue, pero ya no está
Ella puede no armar una escena, ni reclamarte nada.
Puede seguir hablándote igual.
Pero ya no se ilusiona.
Ya no imagina.
Ya no espera.
Y eso significa que poco a poco, aunque no lo digas… la estás perdiendo.